lunes, 28 de mayo de 2007

AHORA VIENE CUANDO LO MATAN...

Pues ya sólo quedan dos jornadas para el final de la liga y estamos igual. Madrid, Sevilla y Barça ganan sus partidos de diferente forma pero con idéntico resultado, los 3 puntos, que es lo que realmente importa. El Sevilla encadena una racha de triunfos seguidos que de haberse producido un pelín antes les hubiera servido para irse líderes en solitario, pero se antoja ya difícil que se puedan llevar la liga a estas alturas (pero no pondré la mano en el fuego). El Madrid gana con ayuda arbitral incluida, parece que ya no están tan indignados con las actuaciones arbitrales que reciben, vaya por Dios, qué cosas, ya no funciona el Villa rato y todo va como la seda. [...] ← Aquí iba un insulto.

Nosotros ganamos con bastante sufrimiento. Bueno, digamos mejor con sufrimiento extremo, después de empezar el partido de 10, jugando y bailando al todopoderoso Getafe, hasta quedarnos con 10 por la expulsión de Ronaldinho. Después de ver el partido, me vienen a la cabeza ciertos pensamientos:

1- El Barca jugó agresivo, fuerte, duro, rápido y con hambre de gol y de triunfo los 90 minutos. Y así despejó la gran duda que teníamos los aficionados sobre el problema del equipo esta temporada. El problema no era físico, era de actitud. Y esto duele. Duele porque estoy convencido de que esta es la mejor plantilla del mundo, y que jugando así hubiéramos ganado todos los títulos que se hubieran jugado. Sin duda. Merecen castigo.

2- El Getafe vino primado. Se empleó duro durísimo todo el partido. Con la connivencia del árbitro. Crea un sentimiento de impotencia ver como un equipo corta a base de patadas todo el juego del tuyo, ensañándose con fijación con Messi, y el árbitro no haga nada para remediarlo. Así una y otra vez hasta que un jugador de los tuyos, harto de recibir faltas, y harto de ser pisado hasta tres veces en una misma jugada estando en el suelo, pues se revuelve y es expulsado. Enhorabuena por el árbitro, que aplicó un rasero “justo” para medir a los dos equipos. Todo esto aliñado por la reprochable actitud de los jugadores visitantes, tirándose al suelo haciéndose el muerto para cortar ataques rivales. Toda una demostración de juego sucio. Sin duda su entrenador estará muy orgulloso de sus jugadores, pues han estado a punto de arrebatarle la liga al Barça, haciéndole llegar así como un héroe a su próximo destino, el banquillo madridista, y todo por un puñado de dólares. Schuster no me sorprende lo más mínimo, es un tipo antipático y borde por naturaleza, jugó ocho años en el Barça y se fue de la peor manera. Aún recuerdo su espantada en la final de la copa de Europa en Sevilla, donde se fue del campo cuando lo cambiaron, sin apoyar y acompañar a sus compañeros en los momentos finales, donde se acabó perdiendo por penalties. Toda una demostración del buen hacer y del buen “talante” del alemán, ejemplo a borrar de todos los libros de conducta. Por mí ya se puede ir al banquillo del Madrid, es un equipo que le viene al dedillo, compañeros de prepotencia no le van a faltar.
3- El Depor jugó primado también. Que triste ver a jugadores dejándose la piel por un mísero dinero, cuando han hecho una temporada mediocre. Sin duda si hubieran jugado toda la temporada como el sábado, ahora ocuparían plaza de UEFA, seguro. Sus aficionados deben estar contentísimos.
4- El bocas de Albelda ha quedado retratado. Habló de la dudosa profesionalidad de los equipos vascos cuando nadie le había dado vela en este entierro, y los mismos equipos vascos le dieron una lección de profesionalidad que recordará siempre. El Osasuna venció a la Real ponéndole un pie en segunda, snif. Mientras el equipo de Albelda, el Valensia, perdía en casa contra otro equipo de la comunidad, el Villareal, que curioso. Si es que hay gente que está mejor callada. Grande Ziganda contestando a Albelda, ellos han cumplido, ahora la pelota está en tu tejado, a ver que haces contra el Levante... [...]← Aquí iba otro insulto.

Poco más. Hoy no debería haber escrito, tengo un mosqueo bastante grande porque he leído comentarios que se hacen por ahí, sobre todo en las páginas de Marca y As. Cuando me mosqueo es mejor dejar pasar un par de días que se calme la cosa, no vaya a ser que se me escapen cosas de las que luego me voy a arrepentir (no por no sentirlas). Sólo voy a cargar todas las tintas en una persona que encarna toda la idiotez que se oye por las ondas y se lee en los diarios, Tomás Guasch, [...]← Este insulto era ofensivo que te cagas.

Tchao!